El consumo energético constituye uno de los costes del hogar. Cierto es que es menor que otros como la telefonía, pero que, según la experiencia de Fundación Naturgy, hay campo para trabajar.
La eficiencia energética es uno de los ejes prioritarios para la transición energética. Cada uno, desde su ámbito, puede hacer por dicha transición, no es una cosa de los gobiernos exclusivamente. Todos podemos colaborar.
¿Qué hacer desde nuestros hogares?
Lo primero que hemos de hacer es fijarnos en cómo consumimos. Desde aquí se puede buscar en qué podemos ser más eficientes en el consumo y, por tanto, reducir la factura energética. Debemos conocer cómo consumir menos y cómo hacerlo en las horas de menores precios, son dos líneas a tener en cuenta.
Lo que más consume en un hogar es lo que tiene que ver con el calor, todo lo que calienta consume más.
¿Qué hacer con la climatización?
En invierno, debemos poner una temperatura de 20ºC en los termostatos generales, 17ºC en los dormitorios y 15ºC, si no vamos a estar en casa. En cambio, en verano, debemos fijar la temperatura del aire acondicionado a 25ºC.
Para no perder energía, se sugiere repasar los aislamientos de puertas y ventanas e instalar burletes, en caso de que no haya. También, se deberán revisar y aislar las persianas por dónde se puede escapar el calor.
Los ventiladores de techo son una alternativa estupenda a los equipos de aire acondicionado y son mucho más baratos tanto para adquirirlos como en su funcionamiento. En muchos casos, es suficiente para mantener un aceptable confort: el movimiento de aire produce una sensación de descenso de la temperatura de entre 3 y 5ºC y su consumo de electricidad es muy bajo.
¿Cuál es la mejor forma de ventilar?
Ahora que vamos hacia el verano, hemos de buscar las primeras horas de la mañana o a última de la tarde, evitando las horas de más calor del día. En esas horas del centro del día, nos vendrá muy bien cerrar cortinas o persianas para mantener fresco el hogar.
En invierno, debemos buscar lo contrario, ventilar en las horas más cálidas para que no se enfríe la vivienda. Con 10-15 minutos de ventilación es suficiente para la vivienda. Ahora habría que ventilar un poco más por el Covid-19.
En invierno, también se recomienda aprovechar a abrir las persianas y cortinas y en las horas solares y cerrarlas por la noche y evitar que el calor se escape.
¿Qué hacemos con los electrodomésticos?
Al igual que decíamos antes, los que calientan siempre consumirán mucho más, habrá que tener mucho cuidado con cómo los utilizamos.
La nevera, frigorífico o congelador
- La principal causa de la pérdida de frío en un frigorífico o congelador se debe al aislante y por la puerta. Por ello, periódicamente habremos de revisar las gomas de la puerta además de evitar tenerla mucho tiempo abierta.
- La temperatura recomendada es de 5º-7º para el frigorífico y -18º a -16º para el congelador.
- Siempre tendremos que comprobar que está suficientemente separado de la pared para que su funcionamiento sea correcto y no se recaliente y consuma más.
- Si el frigorífico produce escarcha, habrá que descongelarlo cuando su grosor llegue a 3 mm.
Lavadora y lavavajillas
- Se deberán utilizar a plena carga, solo si tienen programas de media capacidad usar a media carga.
- Además, en la medida de lo posible, que sean de eficiencia A.
- Profundizando en los programas, se recomienda lavar con agua fría y programas ECO.
Cocina y horno
Actualmente, cada vez más familias disponen de cocina eléctrica, como vitrocerámicas o de inducción. Es importante aprender a cocinar en ellas, para aprovechar el calor residual tanto de la placa como del horno para terminar los platos y no desperdiciar energía.
Si lo que buscamos es un ahorro seguro, sin duda la opción del microondas es la primera, ya que supone un ahorro de entre el 60% y 70% de energía, además de un ahorro considerable de tiempo.
Iluminación
En los puntos de luz que estén encendidos más de una vez al día, se deberán instalar lámparas o tubos fluorescentes de tecnología led. Y para una mejor iluminación, se recomienda más intensidad de luz en las zonas necesarias, como las de lectura o estudio, y mantener una luz ambiente de poca potencia en el resto.
Agua caliente
- Un grifo abierto consume alrededor de 6 litros por minuto. En el caso de la ducha, este consumo se incrementa hasta 10 litros por minuto.
- Si se dispone de caldera o calentador, habrá que regular la temperatura de forma que el agua salga por el grifo a 35ºC.
- En el caso de disponer de un acumulador, además de regular la temperatura, la utilización de un reloj programador puede reducir sensiblemente la factura, si se calienta en las horas de menor precio.
Televisión, equipos informáticos y pequeños electrodomésticos
Después de los frigoríficos, los televisores, dado su uso, son el equipo de mayor consumo a nivel global. Individualmente consumen poco, pero dado el número de horas que se utilizan, acaban subiendo el coste de la factura.
Dentro de los electrodomésticos, los que producen calor son los que más consumen. Hay que evitar apagarlos y encenderlos continuamente. Con lo que programarse para utilizarlos suele funcionar bien. Y recuerda, hay que evitar el stand by.
Fundación Naturgy lleva ya años enseñando a utilizar la energía, mediante talleres, charlas, colaboraciones, webinars, etc., haciendo que las familias ahorren en su factura, consigan reducir su consumo y, también, ayudar al medio ambiente. Para organizar una charla o taller, se puede contactar con Fundación Naturgy.
Autora: Ester Sevilla García, directora de Proyectos Sociales e Internacional de Fundación Naturgy.