Cada vez más, nos adentramos en la obligada transición energética, sin la cual no podremos alcanzar los objetivos establecidos en la Agenda 2030 de Naciones Unidas, que 193 países –entre ellos, España- firmaron el 25 de septiembre de 2015.
Según la Organización Internacional del Trabajo (OIT), disminuir el ritmo del cambio climático y fomentar la sostenibilidad ambiental, conllevará pérdidas de puestos de trabajo en determinados sectores industriales (contabilizados en 6 millones de empleos), pero, en última instancia, contribuirá a crear 24 millones de nuevos empleos en la ‘economía verde’.
El informe sobre «Sostenibilidad medioambiental con empleo. Perspectivas Sociales y del Empleo en el Mundo 2018» de la OIT, ya evidenciaba el impacto que la economía verde tendrá sobre el empleo, en una transición que afectará directamente a sectores como energía, transporte, industria y construcción.
En este horizonte, el debate y acierto sobre qué competencias serán más demandadas, junto con el ajuste e implantación de nuevos programas de formación, son aspectos claves para fomentar empleos con mayor valor añadido y calidad, de cara a las próximas dos décadas.
Demanda de profesionales para la transición energética
Al hablar de transición energética, nos estamos refiriendo a un cambio en el proceso productivo hacia una economía sostenible que haga uso de energías renovables e impulse una mayor eficiencia energética en hogares y edificios.
Un cambio para el que, ya hoy, el mercado laboral demanda profesionales capacitados y preparados para afrontar este reto.
Hace poco más de un año, el Consejo de Ministros dio luz verde a la Estrategia de Transición Justa que, siguiendo las directrices de la OIT y las recomendaciones del Acuerdo de París, tratará de maximizar las oportunidades de empleo de la transición hacia un modelo de desarrollo bajo en carbono.
A partir de esta estrategia, se impulsará el diseño de políticas industriales, de investigación y desarrollo, de promoción de actividad económica, y de empleo y formación profesional, con el fin de asegurar que el tránsito hacia un nuevo escenario productivo sea justo y socialmente beneficioso para todos.
Además, la Estrategia identifica y se alinea con las áreas del Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (PNIEC) 2021-2030 con mayores oportunidades de creación de empleo, entre las que destaca la rehabilitación de edificios y las energías renovables.
En esta línea, el programa Urban Innovative Actions (UIA) de la Comisión Europea, al que pertenece el proyecto EPIU Getafe Hogares Saludables, establece 14 áreas de las que la mayoría están alineadas con la transición energética.
En el caso de EPIU Getafe, se unen innovación, lucha contra la pobreza energética, participación ciudadana, concienciación y formación para generar el cambio.
“Si crees que la formación es cara, prueba con la ignorancia”.
Derek Bok, antiguo rector de Harvard.
Desde la Fundación Laboral de la Construcción, se formará a casi 200 trabajadores del sector de la construcción en cinco acciones formativas ‘verdes’: Eficiencia energética en edificios; Sistemas de energías renovables en edificios; Aislamiento térmico en edificios; Instalación de ventanas; y Eficiencia energética en climatización. Estos cursos se impartirán en modalidad mixta (on line y presencial).
Nuevas necesidades, nuevas competencias ‘verdes’
Estas formaciones ayudarán a los trabajadores a introducirse en las nuevas competencias que, hoy día, demanda la construcción, imprescindibles para conseguir edificios y viviendas sostenibles y eficientes energéticamente.
Como entidad de referencia en el sector de la construcción, la Fundación Laboral está a la vanguardia de las últimas necesidades formativas que las empresas y el sector demandan.
Sin duda, uno de los retos para este cambio de rumbo es lograr cubrir esos nuevos puestos de trabajo que apunta la OIT, con profesionales competentes y bien preparados para el marco que nos presenta la economía verde. Sin olvidar los necesarios planes de formación en nuevas competencias que gobiernos e instituciones deben plantearse, con el fin de alcanzar los objetivos internacionales.
Autora: Matilde Daganzo, técnica de Proyectos Internacionales de la Fundación Laboral de la Construcción.